Tengo un primo que este año ha empezado un ciclo formativo de desarrollo de aplicaciones informáticas. El caso es que a veces me pregunta cosas sobre el mundillo. Eso me hace pensar en mi yo del pasado, y en el tiempo que pasé en la Universidad, y en lo mucho que me habría ayudado tener un mentor.
Yo estudié la extinta Ingeniería Técnica en Informática de Gestión, en la Universidad de Alcalá de Henares, y pasados los años he sabido valorar los conocimientos que allí recibí. Y la sensación es agridulce. De hecho si ahora tuviera que decidir si estudiar una carrera o no, probablemente decidiría no estudiarla. Aunque eso sí, con matices.
La Universidad
Yo llegé a la UAH de rebote. No saqué una gran nota en selectividad, así que acabé allí como último recurso. No pude elegir. Y fue duro, porque para llegar hasta el campus de Alcalá, tenía que gastar dos horas y media de mi vida en el transporte público. Eso para la ida. Para la vuelta gastaba otro tanto. Tantas horas en el Cercanías dan para leer muchos libros. Una pena que por aquel entonces no existiera el Kindle.
Independientemente de la distancia, honestamente creo que perdí mucho tiempo estudiando cosas que no me han servido de mucho. Y lo que es peor, dejé de estudiar muchas otras que me hubiesen venido muy bien.
Allí estudié muchas matemáticas. Está claro que todos los fundamentos de desarrollo de software, se basan en conceptos matemáticos, pero creo que en las Universidades españolas esto no se explica demasiado bien. Estudié asignaturas como Cálculo, Matemática discreta o Estadística, pero nadie me explicó la relación que tenían con el desarrollo de software. Pasados los años soy capaz de ver algunas de esas relaciones, pero lo que estudié es apenas un recuerdo, y ahora sería incapaz de aplicarlo sin tener que estudiarlo otra vez.
Perdí muchísimo tiempo estudiando Contabilidad y Economía de la empresa, porque algún iluminado pensó que nos pasaríamos el día desarrollando clones de Contaplus. Recuerdo vagamente como hacer un asiento de retorno de envases y embalajes, pero jamás lo he aplicado en nada.
Es cierto que también aprendí cosas útiles (a parte de programación claro). Aprendí mucho sobre arquitectura de computadores. Aprender sobre los conjuntos de instrucciones de los x86 o los SPARC, por ejemplo, fue algo muy divertido. Aprender a realizar operaciones binarias con mantisas y exponentes, no lo fue tanto, pero guardo buen recuerdo de ello. También aprendí mucho de redes, con un profesor que era una maravilla. Jamás he visto una red token ring, y tampoco he tenido nunca que particionar una red en subredes, aunque es cierto que todo ese me ha ayudado a comprender como funcionan ciertas cosas. Lo mismo con el modelo OSI (que tiempos). Aprendí bastante de bases de datos, porque el profe también se lo curraba y nos enseñó bien a hacer diagramas de Entidad-Relación.
Existen otros caminos
Estudiar en la Universidad, es una manera de adquirir conocimientos que no tienes, haciendo que alguien te los enseñe. Es una manera totalmente lógica y es a la que estamos acostumbrados desde pequeños. Vamos a un centro educativo (colegio, instituto o Universidad) y escuchamos a diferentes profesores, explicarnos lo que saben sobre unas materias que alguien ha decidido que tienes que aprender. Así ha sido siempre. Pero el mundo ha cambiado mucho desde entonces, y creo que hay otras posibles maneras de adquirir esos conocimientos.
Internet está lleno de cursos, vídeos, tutoriales, libros y blogs que te pueden enseñar todo lo que necesites saber para programar. El problema, es que hay tanta información, y tan variada, que es difícil saber que elegir. No tienes un temario, ni unas materias preestablecidas, porlo que es fácil perderse. Y siempre con el riesgo de ser presa de un hype. Y aunque sepamos qué es lo que queremos aprender, nos podemos encontrar con cursos de dudosa calidad, o tutoriales de esos que solo rascan en la superficie de una tecnología o plataforma.
Así que, con tanta cantidad de información, se hace indispensable la figura de un mentor.
Ojalá hubiese tenido un mentor
Según la RAE un mentor es un consejero o guía. Es alguien que probablemente ha pasado por dónde tú estás ahora, y desde la experiencia, es capaz de aconsejarte para orientar tu formación y desarrollo profesional.
Yo no he tenido un mentor, y no tengo dudas que de haber tenido uno, ahora sería mucho mejor desarrollador de software. Un mentor me hubiese dicho que no me preocupase por el dinero a cobrar, que trabajase en sitios donde pudiera aprender (que me rodeara de buenos profesionales). Un mentor me habría dicho que hiciera más cosas por mi mismo, que programase más en casa, que colaborara en proyectos Open Source. Un mentor me habría presentado (física o virtualmente) a otros desarolladores, y me habría recomendado libros que debería leer. En definitiva un mentor me habría orientado en la dirección correcta para ser mucho mejor profesional de lo que soy ahora.
La idea de la mentoría
Pensando en esto se me ocurrio preguntar por Twitter, si los desarrolladores senior me podían decir, qué es lo que ellos creían que alguien debería saber para ser un buen programador. Así que en un repo de GitHub, algunos buenos samaritanos como Juanma, Sergio, José Antonio o Javier, han contado qué cosas creen que un desarrollador debería aprender. Espero seguir haciendo presión por Twitter para que más gente se una, pero mi poder de convocatoria no es demasiado alto, así que la cosa irá despacio. De todas formas si eres alguien que está empezando, no dudes en leer las impresiones de estos cracks, porque creeme, sus consejos valen muchísimo (y te ahorrarán perder tiempo).
Aun así esto no es suficiente, y sigo dándole vueltas al tema. Yo creo que nuestra profesión mejoraría mucho si todos tuviéramos un mentor, en especial cuando estamos empezando. Y da igual si estamos en la uni, en un ciclo formativo o somos autodidactas. Un buen consejo siempre viene bien. Ando buscando alguna buena idea para gestionar esto, pero de momento sin nada concreto. He estado haciendo busquedas en Google, y he visto que hay muchas aplicaciones específicas para realizar programas de mentoría. También he visto que hay plataformas en las que puedes encontrar un mentor pagando una cantidad de dinero. No lo he probado, pero así a bote pronto, me parecen más bien clases particulares para aprender alguna tecnología o lenguaje. Y este artículo no va de esto.
De momento, y aunque yo no soy nadie importante, y tampoco soy ningún crack, yo me ofrezco para ser tu mentor. Así que si has conseguido leer este ladrillo hasta el final y quieres alguien te guíe un poco sobre las cosas que puedes aprender, yo me ofrezco. Si necesitas un mentor ponte en contacto conmigo (aquí puedes ver como).
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